Recordando a "Don Chente"

Irresponsable. Nunca un Presidente de México había expresado críticas tan acendradas hacia los medios de comunicación como las que fueron transmitidas a través del programa “Fox en vivo, Fox contigo” el pasado sábado. Tachar a los medios nacionales de distorsionar, calumniar, mentir y engañar es, por decir lo menos, irresponsable. Puede ser que el Presidente, como dijo, no vaya a limitar la libertad de expresión de los comunicadores de prensa, radio y televisión; sin embargo, la des calificación pública que el Presidente hizo de todos los medios nacionales, sin distinción, es definitivamente equiparable a la censura o la mordaza.

Mesiánico. Preocupa que Fox se sienta el poseedor de la verdad absoluta. Su verdad, como él dice, es muy diferente de la realidad que hoy, hoy, hoy, ven no solamente los periodistas, sino los mexicanos en general, como lo demuestra la caída en picada de su imagen en las encuestas. La verdad no se hace con buenos deseos, sino con realidades, y es ahí donde ha fallado la administración Fox que no ha sabido mostrar o comunicar los resultados.

Laberinto.Asegura el Presidente que el país tiene proyecto, como si éste fuera salir del laberinto en el que parece encontrarse su administración. A once meses de gobierno se han presentado sólo unos cuantos programas sectoriales, el primer informe fue otro listado de buenas intenciones, el Plan Nacional de Desarrollo fue criticado por falta de contenido, las iniciativas —como la reforma fiscal— se envían al Congreso sin anexos que las sustenten y permitan su análisis. Entonces ¿por qué quejarse y buscar en otros las culpas de nuestros errores u omisiones? ¿Acaso creen el Ejecutivo y su gabinete que es responsabilidad de los legisladores pedir a la oficina presidencial los documentos que les permitan analizar las iniciativas?

Evidencias. Los pleitos y jaloneos que se han dado entre los funcionarios del “gabinetazo” en busca de mayor poder y cercanía con el Presidente han sido evidentes y no son inventos de los medios. El golpeteo del que han sido protagonistas en su momento Castañeda, Derbez, Creel, Gil, Aguilar Zinser, Gertz y Macedo, entre otros, está plasmado en sus declaraciones, en audio y video, y es una necedad negarlo. Si Fox está contento con su gabinete allá él, señal de que no entiende que, por ambición, algunos de sus colaboradores lo empinan constantemente con acciones o declaraciones que lo dejan mal parado, lo cual no es culpa tampoco de los medios.

Aguantar vara. Definitivamente, y aquí lo he señalado, ha habido logros y muy importantes; sin embargo, han sido más los yerros que los éxitos. También he dicho en corto que la tarea no es sólo del Presidente, sino del equipo, del gabinete, que debe realizar su función con eficiencia para que los demás actores políticos de esta incipiente democracia puedan también cumplir su parte. La impaciencia en el hacer, la imprudencia en el decir y la falta de presencia en la agenda nacional –que no en la internacional—, son elementos importantes también para dejar que todos hagan su parte en beneficio de México. El asunto no es personal, señor Presidente.